El caso Monedero, por mucho que pueda parecer que entra dentro de la lógica común de escamotear dinero a la hacienda pública a través de trucos contables cuando se trata de cifras considerables o poco tenga que ver con los multimillonarios desmanes a que nos tienen acostumbrados desde las altas esferas políticas y empresariales, debe tener unas rápidas consecuencias para uno de los líderes más carismáticos de Podemos.
Podemos es una formación que ha despertado la ilusión de buena parte de una población atribulada por un modelo político y económico que ha dado la espalda a los ciudadanos en beneficio de una clase dominante presa de una avaricia y codicia sin límites solo igualada por una erótica del poder como no se recordaba en los tiempos modernos y no puede caer en las mismas o parecidas malas formas que la definen y califican.
Por eso, además de otros menesteres como de abrirse a una mayor parte de la sociedad participativa que le permita ampliar, compartir su discurso y acometer empresas mayores, Podemos debería tomar medidas inmediatas ante este y otros casos que puedan surgir de similar relevancia, además de cesar de sus responsabilidades y apartar de la formación a Juan Carlos Monedero a pesar de la trayectoria que pueda tener en la misma.
Esa gente ha perdido toda credibilidad. ¿Quiénes son ellos para juzgar a los otros, si ellos son los primeros corruptos? Las cadenas informativas están al servicio de la canalla. Otra campaña de desinformación, esta vez contra JC Monedero. Adelante, sigue firme, compañero. Nosotros sabemos quiénes son los corruptos. Yo no quiero que dimita JC Monedero. Sería dar la razón a esa gentuza.
ResponderEliminarLo que es cierto es que independientemente del color político, estamos hablando de humanos. Las personas que tienen a aparecer en puestos de poder o a presentar sus candidaturas a puestos de poder, atesoran cierta ambición en sus corazones. Puede ser una ambición sana o puede ser una ambición egoísta camuflada... Al final, casi todos son iguales. Yo creo que Podemos no se va a librar de cometer los mismos errores que los partidos anteriores, y deberá pagar por sus delitos llegado el caso. Ahora bien, lo que no me parece de recibo es que crucifiquen a Monedero o a Errejón por unos "eurillos" y se pasa tan de puntillas sobre los desfalcos millonarios de otros exponentes populares... o incluso eludan las palabras de Bárcenas acerca de la frecuencia con la que se recogían sobres por parte de miembros del actual gobierno.
ResponderEliminarYo sí creo que debería dimitir Monedero. Es evidente que se está haciendo un uso absolutamente partidista y electoralista del caso. De hecho le califican como corrupto, cuando Monedero no es un corrupto por cuanto no se trata de una persona que, aprovechando su cargo ha obtenido un beneficio ilegítimo. Monedero será, en todo caso, un defraudador o en tentativa de defraudar o de utilizar maneras legales para pagar menos -como casi todo el mundo dado el caso, es cierto-.
ResponderEliminarPero, es posible que tanto vosotros como yo podamos verlo así pero, desde el punto de vista pragmático de la realidad de la mayoría de la gente, Monedero y Podemos ya tienen un lunar. Y eso puede pasarle factura a la formación y no pueden permitirse riesgos de ese tipo ante la oportunidad que se presenta.
Saludos.