lunes, 20 de junio de 2011

19-J: Administrar el éxito

A pesar de la extraordinaria campaña política y mediática para deslegitimar  y poner en jaque al Movimiento 15M, cara a las manifestaciones convocadas para al domingo 19 de Junio y al margen de la guerra de cifras a las que nos tienen acostumbrados acontecimientos de este tipo, lo objetiva y rigurosamente cierto es que la jornada ha sido un rotundo éxito para los organizadores  tanto en el aspecto reivindicativo como en lo pacífico, no habiéndose producido incidentes violentos que tanto hubieran deseado quienes vienen defenestrando al Movimiento desde que irrumpiera en nuestras vidas. Hoy casi producía sonrojo observar el nerviosismo de los cronistas que asomaban de la caverna televisiva de la ultraderecha más radical que, con un claro nerviosismo ante la evidencia del éxito de la convocatoria, no dejaban de llenárseles la boca proliferando toda clase de exabruptos a los manifestantes.

El que hayan sido doscientas o trescientas mil personas -más si cabe-, las que se han echado a la calle en toda España o que en una cadena de televisión aparezca que más del 90 % de la población –aunque no resulte de un análisis técnicamente fehaciente-, esté de acuerdo con las reivindicaciones del 15M, han de servir de claro acicate para, además de continuar en esa línea de movilizaciones, afinar en sus planteamientos y ofrecer alternativas plausibles a la ciudadanía ante los atropellos que la clase política más representativa viene cometiendo –y va a seguir haciendo con el Pacto del Euro-,  envenenada por los grandes mercados financieros y las todopoderosas multinacionales. Un ejemplo significativo es el trabajo realizado por Democracia Real Ya que, en su página web, ofrece un estudio sobre el citado Pacto donde expone sus diferencias y alternativas al mismo que si bien no han de tener que estar planteadas desde el punto de vista del “blanco o negro”, si que aportará un anhelo más de esperanza a la posibilidad de que, ante la presión popular, esas clases dirigentes tan alejadas de la realidad presten atención, no solo a sus reivindicaciones sino también a demandas muy concretas de los ciudadanos. Desde esta misma tribuna ya lo hemos reiterado en varias ocasiones que “se puede cambiar”, que “otro mundo es posible” y que para ello solo hay que tener la firme voluntad de hacerlo.

Por último, tengamos muy presente que, a pesar del éxito obtenido hoy, los enemigos del Movimiento son muchos, con un poder casi sin límites y seguirán atacando a todo ese universo de indignados, con todas las armas a su alcance, y con la clara intención de mediatizar a la opinión pública en su contra, pero no olvidemos también que el futuro no es de ellos sino del resto, la inmensa mayoría de la población que sufre en sus casas y con sus familias el egoísmo de sus continuos desmanes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario