domingo, 31 de julio de 2011

Las recomendaciones del FMI

España necesita, según el último informe del FMI, subir el IVA, los impuestos especiales, bajar más el sueldo a los funcionarios, mayor flexibilidad laboral, que el despido salga más barato,  reducir el déficit y el gasto público y así… ¿generar más empleo que es lo que realmente se necesita para salir de la crisis?

Es decir que si la gente gana menos, trabaja más y tiene más inseguridad en el trabajo, el precio de los carburantes sube, el estado presta menos servicios y, gracias a una nueva subida del IVA todo cuesta más, sugiere el FMI que esa misma gente va a gastar más,  comprar más cosas, las tiendas venderán también más y en consecuencia tendrán que contratar más empleados, por lo que disminuirá el paro y… ¡todos comeremos perdices y seremos felices para siempre!

¡!! ¿Pero, a quien quieren engañar? ¡!!

Si la gente gana menos y aumenta su inseguridad laboral, los precios suben y los servicios públicos bajan ¿Cómo van a gastar más? Es una perogrullada que realmente lo que harán es gastar, salir y comprar menos,  tendrán que ahorrar más –el que pueda ahorrar-, para poder sufragarse, entre otras cosas, los servicios que el estado ha dejado de prestarles y en consecuencia las tiendas, comercios, empresas en general venderán menos, tendrán menos beneficios y no ya bajarán el sueldo o no contratarán a más empleados, sino que los acabarán despidiendo porque será imposible sostenerlos.

Esto es lo que está ocurriendo desde que estallarán las diferentes burbujas financieras e inmobiliarias desde 2007 en todo el mundo y pusieran sobre la mesa las deficiencias de un sistema que se sostenía sobre una ficción crediticia y especulativa.

¿Y todavía no se han enterado?

Pero ¿dónde han estudiado estos señores y señoras del FMI? ¿No será más fácil creer que lo que están pretendiendo es la aniquilación del estado del bienestar –de la que estamos viviendo su fase más incipiente-, en beneficio de las empresas que habrán de cubrir sus servicios y hacer de las clases medias y trabajadoras meras servidumbres, en beneficio de una nueva clase aún más dominante?

Porque de no ser así…

¿Por qué no se persiguen los paraísos fiscales y el tráfico de capitales, la extraordinaria desproporcionalidad entre la presión fiscal sobre las grandes fortunas y la masa trabajadora, los salarios millonarios de los ejecutivos de la grandes empresas que acometen reducciones de plantilla aún con importantes beneficios en su cuenta de resultados e incluso con la ayuda subvencionada de las administraciones públicas,  las ridículas cargas sobre monumentales patrimonios inmobiliarios, el multimillonario tráfico de movimientos interbancarios sin control de ningún tipo, o en el caso español el ingente diferencial entre los salarios y el beneficio empresarial que es el mayor de la UE-15 (los países de similar desarrollo de la UE) y otros muchos vilipendios que realizan los más ricos con la anuencia de todos los organismos nacionales e internacionales sin el más mínimo control?

Christine Lagarde, Directora del FMI
El neoliberalismo consagró la idea de que si no se ejercía presión alguna sobre el gran capital este generaría riqueza para todos a costa de la creación de nuevas empresas y por ende más puestos de trabajo. Pero al cabo de más de 20 años de dominio liberal en toda la escena mundial –incluida España, desde los últimos gobiernos de Felipe González con Pedro Solbes, un liberal vestido de socialdemócrata y los sucesivos gobiernos de Aznar y Zapatero-, ¿se ha cumplido esta proposición? En absoluto, por el contrario, el paro ha aumentado de forma considerable consecuencia de la tecnificación y el desmantelamiento de la industria en los países desarrollados trasladándose los procesos de producción a países subdesarrollados o en vías de desarrollo: el lejano Oriente, Sudamérica, etc. Sin planificar la reubicación de toda la masa trabajadora afecta, consecuencia de una mala e interesada interpretación del concepto de globalización. Y si a esto añadimos fenómenos como la burbuja inmobiliaria, en casos como el de España, sobre la que se asentaba una parte absolutamente desproporcionada del PIB, los resultados para el empleo eran de prever que  fueran necesariamente catastróficos, llegado el pinchazo de la misma.

Para colmo, se pone como ejemplo el modelo alemán donde el empleo frenó su caída, incluso a pesar de la crisis, a costa de reducciones salariales y la pérdida de poder adquisitivo de la clase trabajadora. Lo que ha dado lugar a una extraordinaria caída del consumo interno basando entones su crecimiento en la exportación, asfixiando y extorsionando para ello al resto de los países de su entorno en base a su actitud prepotente como principal motor de Europa. Hoy, casi el 70 % de la población alemana está disconforme con esta política e incluso con la forma en que el gobierno federal presiona a sus vecinos de la UE.

Por último, no hay dato más esclarecedor que este: mientras la economía especulativa solo representaba el 10 % del PIB mundial en los años 70 ahora representa casi el 80 % frente a la economía productiva...

¿Cómo entonces se va a generar así empleo?

¿Por qué no dice nada el FMI de todo esto?

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