lunes, 25 de diciembre de 2017

Ver para creer

Hace sólo unos días el PP de Madrid ha presentado una moción en el Ayuntamiento de la capital a raíz del asesinato de un hombre en Zaragoza por, presuntamente, llevar unos tirantes con la bandera de España y en la que solicitaba que "ningún ciudadano pueda ser agredido, insultado o vejado por lucir en público los colores de la bandera española". Una de esas mociones absurdas  que al PP le gusta presentar fuera de lugar, en un contexto inútil pero se diría que dentro de una estrategia para significarse más patriota que nadie e intentar sacar rédito electoral del asunto. Sobre todo en aquellos ayuntamientos en los que nuevos partidos, en especial los afines o en el entorno de Podemos, participan de su gobernanza.

Puestos a ello al edil del PP encargado de la moción, de nombre Percival Manglano, no se le ha ocurrido otra cosa que preguntar a la alcaldesa Manuela Carmena si los madrileños "pueden llevar los colores de España por la calle sin que ningún amigo de Ahora Madrid les asesine por ello". Lo que como es de suponer le ha costado la correspondiente demanda por parte de la misma. Y eso que la moción salió adelante con los votos de Ahora Madrid.

Sin entrar en detalles del desgraciado suceso de Zaragoza, a fuerza de ser sensatos a ninguna persona normal se le puede ocurrir asesinar a otra por los colores que puedan lucir sus tirantes. Por ello y tal como decíamos al principio no es posible interpretar la citada moción y alusión pepera más allá de una actitud de lo más mezquina y ruin por su parte. Lo que todavía resulta más significativo cuando dichas acusaciones proceden de un partido que ha sido calificado por la Guardia Civil como una organización diseñada para delinquir desde su misma fundación en lo que se refiere a su estructura financiera, al día de hoy imputado como tal por los tribunales de justicia, catalogado como el partido de gobierno más corrupto de la Unión Europea y que en otro tiempo, en cualquier democracia avanzada, a buen seguro hubiera pasado al ostracismo político.

Eso sin contar en su implicación directa como causa y parte de la mayor crisis económica, financiera y política de nuestra historia reciente. Su obstinación por un modelo económico y social que ha colocado a España a la cabeza de los países con mayor desigualdad de la OCDE. Además de promotor de normas y leyes tan cuestionadas como la conocida como "ley mordaza", poniendo en entredicho los derechos y libertades de los ciudadanos con la única mira de salvaguardar sus propios intereses.

Valga recordar que el Partido Popular es el resultado de la refundación de Alianza Popular, un partido creado por ex ministros de un régimen autoritario que se extendió durante 40 años y al que se le exoneró de todos sus delitos, ante las continuas coacciones del ejército, con una ley de punto final conocida por Ley de Amnistía de 1977, un caso único en lo que conocemos por mundo desarrollado. Todo un compendio de personajes que un buen día decidieron convertirse en "demócratas de toda la vida" que ni siquiera fueron capaces de votar afirmativa y unánimemente una Constitución Española de la que su partido se ha convertido ahora en el principal adalid. Eso sí, sólo, cuando interesa.

Cosas.

Salón de Plenos del Ayuntamiento de Madrid

6 comentarios:

  1. Es sorprendente hasta qué punto se manipula la información para fines partidistas. Estamos sumidos en un caos, pero sobre todo porque quien nos gobierna se preocupa más de su asiento que del bien común. Así no hay país que se salve, esté unido territorialmente o no. Porque esto también nos dice que están empeñando el futuro por conveniencias del presente. Horroroso.

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    1. La verdad que no deja de sorprender tal grado de estupidez en estos políticos. Y como no podemos creernos que puedan ser tontos o lelos, parece que todo responde a una estrategia para tener ensimismado a los ciudadanos. Un saludo y Felices Fiestas.

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  2. Excelente y verídico análisis. Estamos a cien años luz de lo que debería ser un gobierno democrático.

    Un saludo

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    1. Y lo peor es que cada vez nos alejamos más de ello.

      Un saludo Juliana.

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  3. Sin menospreciar las opiniones anteriores creo que no toda la " culpa " es de estos o aquellos políticos . seria bueno reconocer que a estos y aquellos políticos, digo aquellos porque ESTO no viene de ahora solamente , están y han estado gobernando por los votos de los ciudadanos o al menos por gran parte de ellos y no es suficiente decir , al menos para mi que es problema de la educación recibida durante años , ni de la desinformación de los medios de comunicación . ni de por dejarse imbuir por políticos interesados . quiero pensar que ya son MUCHOS años para que la ciudadanía sepa distinguir , lo que es CLARAMENTE lo que esta pasando y quienes son los que propician o participan en lo que tenemos . En fin solo es una opinión mas . Un saludo cordial

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    1. No deja de tener también su parte de razón. Es decir también la ciudadanía tiene su parte de culpa en todo esto. Al fin y al cabo, en los tiempos que vivimos, quien tiene interés por "saber" tiene muchas posibilidades a su alcance. Otra cosa es que tenga ese interés. Es lo que decía en mi artículo, a nadie se le puede pasar por la cabeza que una persona "normal" vaya a matar a otra sin más motivo que llevar unos tirantes de un color u otro. Y sin embargo hay gente que se lo cree. ¿Por qué se lo cree? De quien es la culpa de ello, evidentemente habrá que empezar por ellos mismos. Pero...

      Y qué duda cabe, que hay personas que pasan por nuestro lado que son xenófobas, racistas, aporófobas (el nuevo término de la RAE: que tienen fobia a las personas pobres y desfavorecidas), etc. etc. Es el mundo que nos ha tocado vivir.

      Un saludo.

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