miércoles, 19 de octubre de 2011

El escudo antimisiles

Casi de puntillas ha pasado la noticia por los medios de comunicación, más bien diríamos por los artículos de opinión de esos mismos medios, acerca del escudo antimisiles que se va a instalar en Rota. Es de suponer y ello será el principal motivo, que el estacionamiento de más de un millar de soldados sean norteamericanos o en general de las fuerzas de la OTAN, va a significar un revulsivo para la zona, más aún las circunstancias actuales. Sin embargo y sin ánimo de ofender es más que cuestionable que la UE se vaya a gastar 100.000 millones de euros –sí, ha leído bien ¡¡¡CIEN MIL MILLONES DE EUROS ¡!!, una cifra tan desorbitada que casi es imposible traducirla a las antiguas pesetas-, por si acaso a la familia Kim Jong, de los Kim de toda la vida, de Corea del Norte se les ocurre enviarnos un pepino nuclear a Europa o, en su defecto, es al régimen de los ayatolás iraníes el propiciador de tal fechoría.

Sería difícil ahora y, no es el caso, de hacer un comparativa entre el poderío militar de estas dos “superpotencias” con, por ejemplo, los recursos de la OTAN –o la NATO para los más entendidos-, ya que este término de “superpotencia” se ha utilizado de forma ciertamente banal en los últimos tiempos. Por ejemplo, ya en 1990 se nos presentó en la Guerra del Golfo a Irak como el más terrible enemigo de occidente y nos duró 4 Telediarios. No hablemos ya de la aventurilla del triunvirato Aznar-Blair-Bush, 13 años más tarde que apenas si se dilucidó en un Parte de aquellos de la radio, aunque la resolución definitiva todavía este por llegar tras 8 años de auténtico caos y millones de víctimas como muchos vaticinamos.

Por tanto, lo que le da uno que pensar que esto no se trata más que de otra operación multimillonaria de más que difícil justificación objetiva, para servir en realidad a una industria ávida de prebendas y que necesita de excusas –aún tan peregrinas como esta-, para poder seguir desarrollando sus juguetitos para la guerra, ahora que en el mundo, con esto de la globalización, van desapareciendo los potenciales enemigos de verdad… Rusia, China y si es que queda alguno más. En definitiva otro negocio fantástico para los de siempre y a costa de los impuestos de millones y millones de europeos que tienen, al día de hoy, muchos problemas, muchísimos más importantes en que pensar que si un pepino con una estrella roja o una media luna les pueda caer sobre sus cabezas.

Así que tendremos que tragárnosla una vez más –o no-, cuando nos digan que no hay dinero para esto o aquello y que lo que toca es… recortar. Ah, y “austeridad”.

2 comentarios:

  1. El problema de la industria militar es que necesita la guerra para poder aumentar sus ganancias. A estas alturas donde tido esta globalizado y todos los problemas don interdependientes y sólo se pueden resolver a escala resulta anacrónico pensar en misiles. Una de las cosas que, como ciudadanos, deberíamos exigir es que cese la compa-venta de cualquier tipo de armamento.

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  2. Maldito negocio. Maldita sea la avaricia y la codicia. Muchas veces me pregunto ¿para qué querrán tanto dinero? O acaso quizá solo sea la sensación de poder. Saludos

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