jueves, 5 de abril de 2012

Terrorismo blanco

Aunque quien suscribe hace mucho que declinara de la fe cristiana no por menos puede reprochar que ni en Semana Santa nos dejen tranquilos todo este derroche de noticias perniciosas sobre la situación económica y social de los ciudadanos de este país y europeos en general ante la nefasta gestión política de esta puta crisis que desde hace 5 años nos asola. Hoy peor que ayer y mejor que mañana es lo que anuncian cada día las páginas de la prensa general y los acontecimientos que se narran en cada pase por las mismas no son para menos, como hoy mismo cuando nos hemos despertado con el suicidio en la Plaza Sintagma –la Puerta del Sol ateniense-, de un jubilado griego que después de haber cotizado más de treinta años desde su oficio de farmacéutico se veía abocado a rebuscar en la basura para poder sostener a su familia, culpabilizando directamente de ello en una carta a esa clase política que asola su país y al resto de Europa desde hace ya demasiado  tiempo.   Por desgracia, seguro que no será el primero por mucho que desde sus poltronas se muestren hoy consternados los responsables de toda esa batería de recortes que están abocando a la miseria a millones de familias en todo el continente,  mientras sigan alejados de la realidad de cada día.
Pero no, hoy no vamos a hablar de esta manida crisis, ni de alguna de sus vilezas, sino de otra cuestión muy distinta que nos sorprende sobremanera cada año y a la que hace tiempo queríamos dedicarle un artículo en nuestro modesto blog. Y es el caso de la Asociación 11M que preside Pilar Manjón y que desde hace también demasiado tiempo, casi desde aquel trágico 11 de Marzo de 2004, está siendo continuamente vilipendiada por ser la plataforma mayoritaria  constituida por las victimas de aquella tragedia y no querer formar parte de todo ese oscuro entramado que alimenta no sabemos cuantas teorías conspirativas de toda índole, con tal de solapar uno de los mayores errores en la carrera política de José Mª. Aznar.
La Asociación 11M si se le puede objetivar de alguna manera es precisamente por intentar pasar inadvertida para el grueso de la opinión pública, dedicando sus esfuerzos a mejorar las condiciones de vida de las victimas de aquel salvaje atentado. Por no querer formar parte de ese espectáculo mediático que conforman muy determinados medios de comunicación ligados a la derecha, a la ultraderecha y a la prensa de corte amarillista empeñada en revivir cada día cualquier rincón del 11M a la búsqueda de una nueva teoría que exculpe al presidente Aznar, inculpe al presidente Zapatero, deslegitime todo un legítimo proceso electoral y de paso –o sobre todo, siga generando negocio-
Desde el asesinato de J.F. Kennedy aquel 22 de Noviembre de 1963 y los singulares sucesos acaecidos después con el asesinato por parte de un mafioso como Jack Ruby del presunto asesino del presidente Lee Harvey Oswald, hasta la muerte de Osama Bin Leaden, el pasado año, pasando por los atentados del 11 de Septiembre de 2001 en EE.UU. innumerables teorías conspirativas  de todo tipo, han hecho correr ríos de tinta a lo largo y ancho de todo el mundo y han ocupado miles de horas en las administraciones de justicia de muchos países y eso sin entrar ya en auténticos esperpentos como que el inefable Jesús Gil vive en Venezuela o que Elvis Presley, nuestro inolvidable Rey del Rock, está vivo. En cada caso por uno u otros motivos, por razones ideológicas, míticas o legendarias, políticas –como el caso que nos ocupa-, o simplemente auspiciadas por el secretismo de las autoridades, especialmente las militares en muchos casos.
No vamos a entrar aquí a desmontar unas tesis como las del 11M que tienen mucho más de conspirativas que de “conspiranoicas”, que ya han quedado suficientemente desmontadas en los tribunales de justicia y que solo se fundamentan en fisuras de una investigación de tal amplitud que son absolutamente lógicas en casos como estos pretendiendo únicamente con ello poner en tela de juicio la veracidad de un proceso electoral que no por un resultado sorprendente  dejo de ser absolutamente legitimo. Por mucho que se pretenda no es posible poner en entredicho el resultado de aquellas elecciones generales que se celebraron tres días más tarde de los atentados, aún las encuestas que se manejaban durante la campaña por cuanto esto no deja de entrar más que en el terreno de la elucubración, de la distopía o “el que hubiera pasado si hubiera sido” y al margen de la realidad histórica ya que, en cualquier caso, fue la decisión del pueblo español. El gobierno de José Mª. Aznar cometió un error mayúsculo al atribuir de inmediato y hasta con cierta vehemencia la autoría de los atentados a ETA, cuando el modus operandi del mismo ponía en evidencia, desde el primer momento, la  más que posible autoría del fundamentalismo islámico más radical. Solo pueden atribuirse tales de dosis de irrealidad a dos factores que bien pudieran haber sido determinantes para el presidente, su especial y particular animadversión a la banda terrorista o el ver materializadas, en ese mismo momento, las consecuencias de su disparatado  apoyo a la guerra de Irak.
En cualquier caso la violencia verbal utilizada, incluso por personas de alguna relevancia en el PP,   contra la Asociación 11M, el poco tacto de las diferentes administraciones populares para con la misma –a pesar de constituir la mayoritaria, como ya hemos dicho anteriormente- , no hacen más que alimentar la animadversión contra la misma de una enjundia furibunda sin ningún fundamento sobrealimentada a su vez por un periodismo sensacionalista al que poco o nada parece interesarle la verdad, por mucho que se apremie en decir una y otra vez lo contrario.
Criminalizar a la Asociación 11M por no querer ser portadas de diarios y revistas, por no querer encabezar manifestaciones y por no querer, en definitiva, ser más protagonista que sus propios muertos, limitándose a la atención, cuidado y reparación y de sus víctimas, sí que es un auténtico atentado y  una tremenda injusticia a unas personas que sufrirán hasta el fin de sus días un dolor del que nunca  podrán rehabilitarse.

5 comentarios:

  1. Un ejemplo más de que las personas que trabajan por un cambio o una mejora real, silenciosas y concentradas en sus ocupaciones, sin hacer ruido ni escenificar funciones ante los medios, son premeditadamente acosadas y obstaculizadas en su labor por el sistema político y sus lacayos de los medios. Parece que en este mundo el que pretenda hacer las cosas bien la lleva clara. Vaya especie más inútil y retorcida la nuestra...

    Amnistía a los estafadores, alfombra roja para casinos innecesarios, demagogia, mentiras diversas... Todo un pack completo, que llevaría la palabra Premium a su lado si fuese un servicio de mediocridad ofertado en una página cualquiera de la red.

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  2. Da la impresión de que algunos se regodean con el sufrimiento ajeno.

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  3. Solo puedo decir. "gracias por este post".

    Un saludo

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  4. Jesus vino al mundo para hacer el bien y repartir buenos consejos y buenas acciones y lo matamos....
    Es solo un ejemplo de lo que hacemos con lad cosas buenas...

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  5. Sinceramente, muchísimas gracias por vuestros comentarios.

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